Postales de Europa 🖼🏞🇪🇺

Desde que comencé este blog, lancé una exitosa serie de publicaciones de artículos con notas de viaje de mis destinaciones favoritas. Esta es una oportunidad para recordar algunas de estas publicaciones populares con postales de destinos europeos para que las disfrute.

Puerta de Brandenburgo en Berlín al atardecer

Berlín es una ciudad muy vibrante para ser descubierta y apreciada por sus aspectos multiculturales, su papel interesante en la historia y la progresión de su vida artística. Sobreconstruida después de la guerra en el centro de la ciudad, la capital alemana ofrece algunos espacios verdes muy agradables, como el Tiergarten, que atraviesa la división Norte-Sur y proporciona un pulmón natural muy necesario y una oportunidad para la exploración y las excursiones. dentro de su contexto urbano.

Hace relativamente poco tiempo que pasé una semana en Budapest y así descubrí una de las ciudades más bellas de Europa, llena de historia y resplandeciente de joyas arquitectónicas ubicadas a lo largo del Danubio. Me fascinó particularmente la gloriosa belleza del Parlamento e de los varios puentes que se reflejan en el Danubio al atardecer. Budapest también tiene una rica cultura gastronómica que se puede apreciar en los numerosos restaurantes y cafés que sirven comida deliciosa en todo momento del día.

Vivo en Londres porque casi siempre sentí una atracción abrumadora por la ciudad y decidí que aquí es donde quería desarrollar mi carrera y vivir mi vida. Casi 30 años después, todavía estoy enamorado del lugar y estoy asombrado por las oportunidades que la metrópoli puede ofrecer, ya sea que decida aprovecharlas o no. Por supuesto, Londres es la capital europea donde me siento más como en mi casa, a pesar de las recientes tonterías políticas del Brexit y las dificultades de la vida cotidiana en un frenesí constante.

Italia tiene una colección única de aspectos geográficos y culturales que históricamente no siempre se han considerado como una nación coherente. Esta es probablemente la razón por la que hemos estado luchando entre nosotros, desde el principio de los tiempos, y difícilmente podemos expresar un sentido de unidad cultural, aparte cuando estamos bajo amenazas externas, militarmente o para eventos deportivos. Un espléndido ejemplo de la belleza italiana es la fascinación atemporal que Venecia y su edad de oro ejerce sobre los millones de visitantes que deambulan por sus pequeñas calles y los canales de esta ciudad única. Incluso si he estado en Venecia varias veces, cada vez es un descubrimiento increíble de rincones ocultos y aspectos que no había notado antes. Este es un lugar al que puedo llegar a tiempos interminables y siempre sentir una sensación de novedad, combinada con conexión y pertenencia. De hecho, mi familia es originaria de la República de Venecia, cuando su alcance se extendió también a Apulia y necesitaban tener un gobernador residente permanente para representar los intereses de la República Serenísima allí.

Por su posición geográfica en Italia, Bari ha desempeñado naturalmente el papel de puerta de entrada del Mediterráneo Oriental, centro comercial y punto de intercambio en la ruta utilizada desde la época griega y romana hasta las cruzadas y, más recientemente, como vínculo con los Balcanes occidentales. Bari tiene una larga historia de conexiones sociales y culturales entre la mitad oriental y occidental del Mediterráneo, personificada por la historia del santo patrón de la ciudad, San Nicolás, obispo de Myra en Asia Menor, cuyos restos se trasladaron a Italia y son ahora venerado por la amplia Iglesia cristiana, junto con las muchas tradiciones vinculadas al santo.

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